Foto Sergi Agusti
La semana pasada me crucé con Sando por la calle. Eran casi las seis de la tarde y estaba anocheciendo. La oscuridad empezaba a invadir las calles de Lubumbashi. Iba tan concentrado en sus cosas, que hasta que no estuve delante de el no se dio cuenta de mi presencia. “jambo Sergi, no te he visto. Estaba pensando en lo que Carlos nos ha explicado hoy en el taller….” Entonces nos paramos al lado de un árbol y charlamos un rato. Me contó que vive con su mujer y sus cuatro hijos, además de su cuñada y sus 3 hijos. Y claro, cuando llega a casa, le es imposible ponerse a componer. Por eso aprovecha cuando camina por la calle para pensar en sus canciones. “En lugar de coger el bus (las furgonetas locales atiborradas) camino y así puedo estar sólo y tranquilo.”
Me cuenta también que a veces se despierta por la noche con una melodía en la cabeza. Y entonces busca una pequeña grabadora que tiene y graba la canción para que no se le olvide. “pero tengo que hacerlo a escondidas porque sino mi mujer se despierta y me grita que estoy loco. Pero yo no puedo hacerlo de otra manera. No quiero que se me escapen las canciones”
Hoy martes hemos ensayado todos juntos la canción que hemos compuesto durante estas semanas. mañana miércoles y jueves, nos encerramos en el estudio para grabarla.
Hace solo 3 semanas que llegamos pero parece que estemos en Lubumbashi desde hace mucho tiempo. África es muy intensa y estar todo el día rodeados de músicos y compartir con ellos el proceso creativo de una canción nos ha permitido vivir intensamente todos los momentos del día.
Lubumbashi es el polo opuesto del poder de la capital Kinshasa. En la región de Katanga la vida es más tranquila y deja más tiempo para crear.
Llegamos sin conocer nada de nada, pero con la seguridad y el convencimiento de que algo iba a nacer. Sabedores de que en África, hay un artista en cada esquina, nuestro propósito de hacer nacer una canción en un país en el que se supone que sólo existe tristeza, no era más que responder a una necesidad. La de dar una voz a los que quieren decir que están listos para un mundo diferente.
El destino y la suerte quiso que encontráramos el primer día el lugar ideal para desarrollar el proyecto.
Después de una serie de conversaciones con los músicos locales, decidimos instalar nuestro centro de trabajo en un espacio llamado La Halle de l´étoile, un lugar en el centro de la ciudad donde todos los artistas de Lubumbashi se reúnen y realizan sus actividades. Pintores, músicos, bailarines, fotógrafos etc… se encuentran aquí para intercambiar experiencias y compartir sus aficiones.
El objetivo de nuestro proyecto es doble: por un lado intercambiar experiencias a nivel musical con los talleres de composición de canciones y de grabación y sonido que hemos organizado y donde han participado más de 80 alumnos. Y por otro lado, poner en práctica todos estos nuevos conocimientos para componer una canción - himno, que interpretaremos todos en el concierto de clausura que estamos organizando para el sábado 11 de abril a las 16 h en pleno centro de la ciudad.
Pero sobretodo demostrarnos a todos la utilidad y la importancia de la creación artística como instrumento de educación y reconstrucción social.
Este proyecto está siendo un regalo para nuestros oídos. Estamos todo el día rodeados de buenos músicos, de preciosas melodías. por los talleres han pasado muchos de los estilos de Lubumbashi. Desde la rumba congolesa, hasta el hip hop más reivindicativo y moderno, pasando por los “Karindula”, un grupo de músicos pregonero que van por los mercados improvisando canciones para distraer a la gente.
Gino es el cantante del grupo Karindula que ha participado en los talleres y en la canción. Posee una voz rota impresionante y se acompaña de un banjo construido con una lata de leche en polvo y unas maderas. Hace unos días estuvimos de visita en su barrio, en las afueras de Lubumbashi. La Kenya, que es como se llama esta zona, está habitada por los que menos recursos tienen y las calles está llenas de niños a todas horas. El mercado más grande de la ciudad se encuentra aquí. Y aquí es donde empezaron lo Karindula a construir el instrumento que habíamos encargado. Una cabra iba a ser una de las partes importantes del instrumento. La piel de ese pobre animal atado a un palo iba a recubrir un bidón oxidado que haría de caja de resonancia del bajo. Allí acababa la vida de la cabra y empezaba la de un nuevo instrumento.
Ahora falta pintarlo de colores. Y llevarlo a España. No se si me lo dejarán embarcar en el avión….
Ayer comentaba con Dominique, el responsable del Halle de l´étoile, el lugar donde ensayamos y grabamos, las características de la canción que hemos compuesto. “el objetivo era más el camino , que la canción en si misma”. Pero el grado de implicación de los participantes es tan grande, aportando ideas y letras, que la canción está sonando cada día mejor y se ha convertido en un reto para todos.
Ya faltan pocos días para el concierto y ahora todo se sucede muy rápido. Por un lado estamos llevando a cabo la promoción del evento con cuñas en la televisión y radios locales y carteles por toda la ciudad. El jueves y el viernes hemos organizado una caravana musical para ir por la ciudad repartiendo invitaciones. Queremos que venga todo el mundo !!
Durante el concierto repartiremos al público papeles con la letra de la canción himno para que todo el mundo pueda acompañar a la coral y a los cantantes. Queremos que, en el concierto de clausura, cuando cantemos todos la canción, consigamos ese “subidón” de energía que signifique que hemos conseguido el objetivo.
Energía y pasión. Dos elementos que combinados pueden romper cadenas y empezar el camino. Dos componentes esenciales en la reconstrucción de una sociedad. La voluntad y la actitud de la propia sociedad congolesa en querer cambiar las cosas es imprescindible para que RD Congo pueda ahora iniciar un camino hacia la paz.
“Rendons à la terre sa couleur / devolver al mundo su color ”.
Esta es la letra de una de las estrofas que Jean Marc propuso en los talleres. Una frase que a todos nos hacía sentir algo. Un mensaje positivo y activista que a todos nos convenció. Al final este trozo del estribillo se ha convertido en el eje del mensaje.
“Devolver al mundo su color “
una melodía que sueña……
Sergi Agusti
Me cuenta también que a veces se despierta por la noche con una melodía en la cabeza. Y entonces busca una pequeña grabadora que tiene y graba la canción para que no se le olvide. “pero tengo que hacerlo a escondidas porque sino mi mujer se despierta y me grita que estoy loco. Pero yo no puedo hacerlo de otra manera. No quiero que se me escapen las canciones”
Hoy martes hemos ensayado todos juntos la canción que hemos compuesto durante estas semanas. mañana miércoles y jueves, nos encerramos en el estudio para grabarla.
Hace solo 3 semanas que llegamos pero parece que estemos en Lubumbashi desde hace mucho tiempo. África es muy intensa y estar todo el día rodeados de músicos y compartir con ellos el proceso creativo de una canción nos ha permitido vivir intensamente todos los momentos del día.
Lubumbashi es el polo opuesto del poder de la capital Kinshasa. En la región de Katanga la vida es más tranquila y deja más tiempo para crear.
Llegamos sin conocer nada de nada, pero con la seguridad y el convencimiento de que algo iba a nacer. Sabedores de que en África, hay un artista en cada esquina, nuestro propósito de hacer nacer una canción en un país en el que se supone que sólo existe tristeza, no era más que responder a una necesidad. La de dar una voz a los que quieren decir que están listos para un mundo diferente.
El destino y la suerte quiso que encontráramos el primer día el lugar ideal para desarrollar el proyecto.
Después de una serie de conversaciones con los músicos locales, decidimos instalar nuestro centro de trabajo en un espacio llamado La Halle de l´étoile, un lugar en el centro de la ciudad donde todos los artistas de Lubumbashi se reúnen y realizan sus actividades. Pintores, músicos, bailarines, fotógrafos etc… se encuentran aquí para intercambiar experiencias y compartir sus aficiones.
El objetivo de nuestro proyecto es doble: por un lado intercambiar experiencias a nivel musical con los talleres de composición de canciones y de grabación y sonido que hemos organizado y donde han participado más de 80 alumnos. Y por otro lado, poner en práctica todos estos nuevos conocimientos para componer una canción - himno, que interpretaremos todos en el concierto de clausura que estamos organizando para el sábado 11 de abril a las 16 h en pleno centro de la ciudad.
Pero sobretodo demostrarnos a todos la utilidad y la importancia de la creación artística como instrumento de educación y reconstrucción social.
Este proyecto está siendo un regalo para nuestros oídos. Estamos todo el día rodeados de buenos músicos, de preciosas melodías. por los talleres han pasado muchos de los estilos de Lubumbashi. Desde la rumba congolesa, hasta el hip hop más reivindicativo y moderno, pasando por los “Karindula”, un grupo de músicos pregonero que van por los mercados improvisando canciones para distraer a la gente.
Gino es el cantante del grupo Karindula que ha participado en los talleres y en la canción. Posee una voz rota impresionante y se acompaña de un banjo construido con una lata de leche en polvo y unas maderas. Hace unos días estuvimos de visita en su barrio, en las afueras de Lubumbashi. La Kenya, que es como se llama esta zona, está habitada por los que menos recursos tienen y las calles está llenas de niños a todas horas. El mercado más grande de la ciudad se encuentra aquí. Y aquí es donde empezaron lo Karindula a construir el instrumento que habíamos encargado. Una cabra iba a ser una de las partes importantes del instrumento. La piel de ese pobre animal atado a un palo iba a recubrir un bidón oxidado que haría de caja de resonancia del bajo. Allí acababa la vida de la cabra y empezaba la de un nuevo instrumento.
Ahora falta pintarlo de colores. Y llevarlo a España. No se si me lo dejarán embarcar en el avión….
Ayer comentaba con Dominique, el responsable del Halle de l´étoile, el lugar donde ensayamos y grabamos, las características de la canción que hemos compuesto. “el objetivo era más el camino , que la canción en si misma”. Pero el grado de implicación de los participantes es tan grande, aportando ideas y letras, que la canción está sonando cada día mejor y se ha convertido en un reto para todos.
Ya faltan pocos días para el concierto y ahora todo se sucede muy rápido. Por un lado estamos llevando a cabo la promoción del evento con cuñas en la televisión y radios locales y carteles por toda la ciudad. El jueves y el viernes hemos organizado una caravana musical para ir por la ciudad repartiendo invitaciones. Queremos que venga todo el mundo !!
Durante el concierto repartiremos al público papeles con la letra de la canción himno para que todo el mundo pueda acompañar a la coral y a los cantantes. Queremos que, en el concierto de clausura, cuando cantemos todos la canción, consigamos ese “subidón” de energía que signifique que hemos conseguido el objetivo.
Energía y pasión. Dos elementos que combinados pueden romper cadenas y empezar el camino. Dos componentes esenciales en la reconstrucción de una sociedad. La voluntad y la actitud de la propia sociedad congolesa en querer cambiar las cosas es imprescindible para que RD Congo pueda ahora iniciar un camino hacia la paz.
“Rendons à la terre sa couleur / devolver al mundo su color ”.
Esta es la letra de una de las estrofas que Jean Marc propuso en los talleres. Una frase que a todos nos hacía sentir algo. Un mensaje positivo y activista que a todos nos convenció. Al final este trozo del estribillo se ha convertido en el eje del mensaje.
“Devolver al mundo su color “
una melodía que sueña……
Sergi Agusti
Querido Sergi:
ResponderEliminarMe atrae hasta el nombre del blog. Que sepas que mi obsesión son los colores. Los necesito para vivir y sentir, e incluso los utilizo para regalárselos a los amigos. Si te falta un naranja, me lo dices.....
Un arcoiris de besos y la mejor de las suertes!!!.
Pilar desde el búnker albanés
Hola Sergi, soy Patri (castellón), me encanta lo que haces y la pasión con que lo haces, como dice tu amiga Pilar, los colores son la vida en si misma, pero la música... es el mejor regalo que nos ha dado el universo, la mejor forma (a mi modesto entender) de comunicación y conciencia sobre nuestro mundo y lo que se siente en las diferentes partes de el.
ResponderEliminarQuiero mandarte un fuerte abrazo y toda la energía para que todo salga como esperas y que absolutamente todos (estemos allí o no) podamos disfrutarlo.
Muchísimos besos
PD: leerte me da fuerzas para seguir con mi opo y me reafirma más aun que es solo un medio para conseguir un fin, algún día yo también compartiré mis proyectos contigo.
Precioso, conmovedor,empezando por el título y terminando por el último punto. Genial!
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